sábado, 20 de febrero de 2010

LA ORACIÓN, UN ESTILO DE VIDA

Mateo 6.5 5 Y cuando ores, no seas como los hipócritas; porque ellos aman el orar en pie en las sinagogas y en las esquinas de las calles, para ser vistos de los hombres; de cierto os digo que ya tienen su recompensa.

Preguntas:
• ¿Qué es la oración?
• ¿Cuánto tiempo consideras que es bueno invertir en oración?
• ¿Cuáles son los motivos por los que debemos orar y cuál debe ser nuestra actitud?

Objetivos:
• Comprender la importancia que tiene la oración en la vida de todo creyente.
• Que el oyente pueda hacer de la oración un hábito para su vida diaria.

El Poder De la Oración: Una mujer pobremente vestida, con un rostro que reflejaba derrota, entró a una tienda. La mujer se acercó al dueño de la tienda y, en la manera más humilde, le preguntó si podía llevarse algunas cosas a crédito. Con voz suave le explicó que su esposo estaba muy enfermo y que no podía trabajar; tenían siete niños y necesitaban comida. El dueño le gritó y le pidió que abandonara su tienda. Viendo la necesidad que estaba pasando su familia la mujer continuó: "¡Por favor señor! Se lo pagaré tan pronto como pueda". El dueño le dijo que no podía darle crédito ya que no tenía una cuenta de crédito en su tienda. De pie cerca del mostrador se encontraba un cliente que escuchó la conversación entre el dueño de la tienda y la mujer. El cliente se acercó y le dijo al dueño de la tienda que él se haría cargo de lo que la mujer necesitara para su familia. El dueño, de una manera muy tosca, preguntó a la mujer: ¿Tiene usted una lista de compra?" La mujer dijo: "Si señor". "Está bien," dijo el dueño, "ponga su lista en la balanza y lo que pese su lista, le daré yo en comestibles". La mujer titubeó por un momento y cabizbaja, buscó en su cartera un pedazo de papel y escribió algo en él. Puso el pedazo de papel, cabizbaja aún, en la balanza. Los ojos del dueño y el cliente se llenaron de asombro cuando la balanza se fue hasta lo más bajo y se quedó así. El dueño entonces, sin dejar de mirar la balanza y de mala gana, dijo: "¡No lo puedo creer!". El cliente sonrió y el dueño comenzó a poner comestibles al otro lado de la balanza. La balanza no se movió por lo que continuó poniendo más y más comestibles hasta que no aguantó más. El dueño se quedó allí parado con gran disgusto. Finalmente, agarró el pedazo de papel y lo miró con mucho más asombro…. No era una lista de compra, era una oración que decía: Querido Señor, tú conoces mis necesidades y yo voy a dejar esto en tus manos". El dueño de la tienda le dio los comestibles que había reunido y quedó allí en silencio. La mujer le agradeció y abandonó su tienda. El cliente le entregó un billete de cincuenta dólares al dueño y le dijo: Valió cada centavo de este billete". Sólo Dios sabe cuánto pesa una Oración.

Introducción: Jesús practicó la oración en todos lados el oraba tanto en el templo como en la calle así en un desierto como en una casa llena de gente, sin embargo Jesús aconseja que no seamos como los hipócritas, esta palabra proviene del griego jupokrités; que quiere decir <>y lo que Dios quiere enseñarnos es que no hay necesidad de hacer una actuación Lo cierto es que la oración es un estilo de vida.
I. LA ORACIÓN DEBE SER NATURAL
a. Es decir que no necesitamos hacer un drama a la hora de acercarnos a Dios la palabra nos enseña en Juan 15.15 que Dios nos habla como a sus amigos y a un amigo le hablamos con confianza.
b. Con un amigo se es honesto, se le habla con la verdad debemos ser naturales cuando oremos. Debemos acercarnos a Dios con corazón sincero. (Hebreos 10.22)
c. Moisés hablaba con el Señor cara a cara y Dios mismo declaro que con Moisés hablaría como quien habla a su amigo. (Éxodo 33.11)
II. TÓMELO COMO UN PRIVILEGIO
a. Orar no debe ser una carga sino un privilegio para cada uno de nosotros, debe ser un deleite acercarnos a hablar con nuestro hacedor.
b. Es increíble como algunas personas son inalcanzables cuando intentamos hablar con ellos; pero nuestro Dios siempre está dispuesto a escucharnos cuando queremos hablar con él. (Salmo 10.17)
c. La oración debemos aprender a disfrutarla, debe ser para nosotros un deleite y un gozo estar en la presencia de Dios (Salmo 16.11)
III. HÁGALO UN ESTILO DE VIDA
a. Nuestra oración no tiene que ser en un lugar específico sino que un estilo de vida que se debe practicar en todos lados. 1ª. Timoteo 2.8.
b. 1ª. Tes. 5.16-18 nos enseña que la oración debe ser constante, o sea que debemos tener una vida de oración ya que es parte de nuestra relación con nuestro Dios.
c. No hay nada de malo en orar largo al contrario las oraciones largas en privado son buenas, pero si estamos comenzando a hacer de la oración un estilo de vida podemos comenzar orando por periodos cortos.
IV. ¿CÓMO DEBEMOS ORAR? Marcos 6:9-13 Siguiendo la guía de la oración del Padre nuestro:
a. Adorar: Debemos comenzar adorando a Dios Padre y pidiendo que sea hecha su voluntad aquí en la tierra: en nuestra familia, ciudad, iglesia, etc. Ver 9-10
b. Peticiones personales: Pedir por que se no sea dado el pan de cada día: es decir podemos pedir por todas nuestras necesidades y las de la gente. Ver.11
c. Perdón y perdonar: Pedir perdón por nuestros pecados y perdonar a todos aquellos que nos han ofendido. Ver. 12
d. Pedir protección y fuerzas para no caer: Es importante orar pidiendo a Dios que no nos permita caer en tentación y orar para que Dios nos proteja. Ver.13
e. Terminar dando gracias y adorando a Dios.

Conclusión: La vida de un cristiano debe ser una vida de oración es parte del alimento de nuestra alma; es en la oración donde somos consolados, donde recibimos la respuesta de Dios, cuantas veces quizás nos hemos sentido atribulados, derrotados y desanimados pero cuando entramos en la presencia de Dios en oración aunque todavía no veamos la respuesta viene paz a nuestro corazón. La primera oración que Dios escucha de nosotros es cuando recibimos a Jesús como Señor y Salvador y es entonces cuando comenzamos a disfrutar del beneficio de hablar con Dios.

ORACIÓN DEL PECADOR
Señor Jesús reconozco que he pecado y que tú moriste por mí, hoy me arrepiento y te pido perdón. Te entrego mi vida y mi corazón para que seas mi Señor y mi Salvador, amén.

Aplicación práctica:
• Como líder dirija una oración siguiendo el ejemplo del Padre Nuestro, y guie a los asistentes a orar de la misma manera.
• Motive a los miembros y visitantes de su CDP a hacer el hábito de orar diariamente. Ayúdelos a que elijan un tiempo durante el día en el que puedan orar a Dios.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Bienvenidos